
Sin duda, estos días están siendo una auténtica locura, con reuniones a medio tren, compras aceleradas, grandes banquetes y regalos, muchos regalos. No sólo para nosotros, los jugadores, si no también para nuestros personajes, que andan como locos buscando atuendos navideños, regalos bajo el árbol, monturas festivas y coleccionando pets.
Como cada año, los adalides se reúnen bajo el árbol del Gran Padre Invierno, tanto en Forjaz como en Orgrimar, y disfrutan de uno de los eventos más queridos por todos. Para ello, se afanan cocinando galletas, bebiendo sidra o cumpliendo con tareas tan entrañables como liberar al reno Metzen. En ambas capitales, se vive un gran caos, con personajes corriendo en todas direcciones, los que quieren divertirse en la bola gigante de nieve y los que esperan largas colas para subirse al trineo que sobrevuela las dos ciudades.
«Es un caos total. No veíamos tanta locura en las calles desde el descenso de Alamuerte» -nos comenta Macey Calderilla, vendedora ambulante de los Pastos de Bosquehumeante-«pero, claro, estas fechas son muy especiales, hay que acostumbrarse a todo».
«Lo cierto es que estos días, hay que aprovecharlos muy bien» -nos aclara su compañero Wulmort- «es la ocasión perfecta para ganar mucho dinero, jeje».
Aunque no lo parezca, hay mil tareas que realizar: no sólo en las propias ciudades, si no también en otros lugares de Azeroth, como en las Laderas de Trabalomas. Ahí, nuestros personajes deben enfrentarse al malvado Grinch y acabar con él para liberar al reno Metzen. Si tienen éxito, podrán llevarse una buena recompensa. Pero aún pueden realizar más tareas navideñas, como las de las ciudadelas de Draenor, donde encontrarán nuevas misiones, entre las cuales pueden incluso llevarse una montura como recompensa: el esbirro de Gruñoncio.
«No podrán decir que se aburren, aquí pueden decorar su ciudadela con un gran árbol, luces y todos los adornos imaginables» -interviene Izzi Silbacebo, coordinadora de eventos- «y por supuesto, llevarse suculentos regalos. Es una época increíble para los negocios, quiero decir, para estar con amigos y todo eso».
Como veis, hay muchas tareas pendientes y el tiempo corre en nuestra contra. El de enero acabará todo esto, los adalides deberían aprovechar y recoger todos los regalos de debajo del árbol antes de que se queden sin ellos!

Aficionada al leveo y coleccionista de personajes