El lanzamiento de Shadowlands el pasado 24 de Noviembre ha sido uno de los lanzamientos mas «limpios» que se recuerda de las últimas expansiones.

En esta ocasión Blizzard se ha colgado una medalla al conseguir que uno de los eventos mas esperados de los últimos meses saliese adelante sin tener que esperar interminables horas de colas ante la pantalla de carga del juego o sufrir desesperantes caídas tras llevar apenas unos minutos conectados.

Sin embargo este hecho no ha sido celebrado con el mismo entusiasmo por todo los jugadores de World of Warcraft.

La comunidad oficial de Haters del videojuego se ha quejado públicamente ya que según ellos «nos hemos quedado sin motivos para protestar»

Nos parece increíble que Blizzard nos haya privado de uno de nuestros momentos favoritos dentro del juego. Desde el año 2014 con el lanzamiento de Warlords of Draenor, habían conseguido que todas las expansiones empezasen de forma increíblemente catastrófica. Sin embargo este año ha sido muy decepcionante. Algunos de nosotros no podíamos entender porqué éramos capaces de acceder al juego a la primera y hacer las misiones sin desconexiones intermitentes o sin apenas lag.

Estudios científicos han demostrado recientemente que dentro del código genético de un hater existe una orden que obliga al cerebro a segregar serotonina ante situaciones adversas, lo que hacen que frustrarse o enfadarse ante este tipo de situaciones,  les produzca una extraña sensación de felicidad. No obstante, el hecho de no poder enfadarse, hace que realmente se enfaden lo que consigue que segreguen esa serotonina que tanto necesitan. No es mas que un método de supervivencia – confirma el estudio.

El lanzamiento de World of Warcraft Classic el pasado año si que fue un eventazo; no recordamos haber hecho tantas capturas de pantalla y publicar tantos tweets en la vida. Sin embargo este año ha sido altamente decepcionante. Algunos de nosotros nos habíamos pedido días libres en el trabajo y nos habíamos preparado con provisiones para pasar toda la noche quemando foros y redes sociales. No ha servido para nada. Exigimos a Blizzard una compensación por el tiempo de protesta perdido.

Desde Blizzard han comunicado que están trabajando en una versión del juego que se cuelgue con relativa frecuencia.

«World of Warcraft Crush» será un simulador en el que el hater podrá vivir la experiencia de desesperación en tiempo real. Estará programado para que el acceso sea complicado y una vez dentro, el jugador experimente bugs y caídas constantes. Además crearemos un foro alternativo en el que podrán colgar sus quejas. Los moderadores encargados de ese foro tendrán permiso para ningunear los mensajes o incluso podrá insultar a los jugadores. Estamos seguro de que esta experiencia les hará sentirse a los haters como realmente se merecen.