«Me obligaron a sacarme el doctorado y pagarlo de mi bolsillo».

 

Como se rumoreaba últimamente por las calles de la ciudad, el peluquero de Orgrimmar ahora ofrece nuevos servicios, entre los que se encuentran el cambio de género o los tatuajes.
Nuestro equipo de redacción se ha puesto en contacto con Bebri Ricitos, la conocida peluquera de la ciudad horda. Al preguntarle por los nuevos servicios de su peluquería, se podía notar su frustración al respecto.

«¡Están locos! Me parece muy bien que se implante la posibilidad del cambio de género en las ciudades de la horda, no lo negaré. ¿Pero hacerme estudiar un doctorado en cirugía y que sea yo la que realice las operaciones? ¿No hay oro para médicos en esta facción o qué?»

Al parecer, la iniciativa viene por parte del nuevo consejo de líderes de la facción. Antiguamente ya se implantó la cirugía facial en la misma peluquería, pero esta vez han decido dar un paso más allá y se podrán realizar muchos tipos de variaciones estéticas. Una de las más populares, el cambio en el color de los ojos.

«¿Pero tú ves normal que venga alguien y me pida que le deje ciego de un ojo para verse más «cool»? Y no hablemos de los elfos de sangre. Unos quieren los ojos azules, otros verdes, otros dorados…» – comenta la peluquera-cirujana, ofuscada.

Estos cambios en la peluquería de la ciudad, también implantados en el resto de peluquerías a lo largo de Azeroth, han sido muy bien recibidos por parte de los habitantes.
Sin embargo, podemos estar ante un caso de explotación laboral, cuyos culpables serían los líderes de las facciones. Por lo que nos informa Bebri, esto también ha ocurrido en ciudades de la alianza.
¿Saldrán tanto el consejo de guerra de la horda como el rey Anduin Wrynn a explicar por qué utilizan a los peluqueros para estos cometidos en lugar de contratar a médicos reales?

De momento os podemos adelantar la última novedad de la peluquería: algunas razas tendrán la posibilidad de añadir flora a su pelaje. Por lo visto también han tenido que estudiar jardinería y, además, con un toque de racismo al solo permitir que unas razas concretas puedan acceder a ese servicio.