La verdad tras el pacto de Erazmin y Gelbin

Casi dos años después de que los Mecagnomos se uniesen a la Alianza, el príncipe Erazmin rompe su silencio y saca a la luz lo más oscuro de un pacto que solo beneficiaba a Mekkatorque.

Ha pasado casi un año desde aquel 15 de Enero de 2020 en el que la Alianza acogía, por fin, a su raza más odiada esperada: los Mecagnomos.

Tras ayudarles a derrotar al rey de Mecandria, el rey Mekkatorque firma un pacto con el príncipe Erazmin a través del cual será Gelbin el rey legítimo de los Gnomos y los Mecagnomos, además de Mecandria.

Sin embargo, este pacto disponía de una serie de puntos que se pactaron de viva voz (no aparecen escritos en el acuerdo) y que después de todo este tiempo Gelbin no solo no ha cumplido su parte si no que además no tiene pinta de querer hacerlo.

Erazmin, sintiéndose totalmente engañado y ante una situación de desesperada impotencia, ha decidido acudir a «El Pergamino» para hacer pública esta situación de abuso que tanto él como su pueblo están sufriendo.

Éste es su testimonio:

El pacto inicial que hice con Gelbin era que durante algún tiempo él asumiría la regencia de Mecandria y los Mecagnomos, mientras yo me preparaba para ser rey.

Desde su punto de vista, yo no tenía aún el criterio suficiente para gobernar, pero él me facilitaría los mejores recursos y formadores de Gnoméregan para que me preparasen para ser rey.

Mientras tanto, él gobernaría Mecandria y a los Mecagnomos en mi nombre. 

Sin embargo, hace ya casi dos años de aquél pacto y ni siquiera han empezado a elaborarse los presupuestos para mi plan de formación como gobernante.

Con la excusa de que siempre hay otra cosa «más urgente«, ha ido aplazando la reunión para comenzar (repito, para comenzar) ha hablar de mi preparación como soberano.

Por si esto fuera poco, durante este año y poco de mandato, tanto Gelbin como los gnomos de Gnoméregan han, literalmente, explotado a mi pueblo. Somos los Mecagnomos los que nos tenemos que encargar no sólo de los trabajos de reconstrucción en Mecandria, si no también los de reconstrucción de Gnoméregan (que dicho sea de paso, se trata de una chapuza de ciudad) .

He tratado de hablar con Gelbin por activa y por pasiva pero nunca tiene tiempo para mi. Asegura estar ocupadísimo, sin embargo, para irse de vacaciones a las costas de Tuercespina sí que ha tenido tiempo.

Como no ha querido ir por las buenas, iremos por las malas, y mi pueblo, harto de los abusos recibidos por parte de los gnomos, vamos a preparar el proceso de independencia, no solo de los Gnomos, si no también de la Alianza que no nos está ayudando en esta situación.

Composición de dos imágenes realizadas por el artista  askonn-art

Por su parte, Gelbin no ha querido pronunciarse ni atendernos para una entrevista.

Desde «El Pergamino» enviamos todo nuestro apoyo al príncipe Erazmin y esperamos que pronto pueda solucionar todo este asunto.